EL TRABAJO Y LA FELICIDAD

¿Quién no ha querido alguna vez levantarse de la cama para ir al “tajo”? 😉. Hablemos de: el trabajo y la felicidad.

El salario ya no es el único determinante que satisface a los empleados, a menos que los ingresos no sean suficientes ni para ir tirando. Un 80% de los trabajadores “odia” los lunes, y es que es muy difícil ir a trabajar con una sonrisa en la cara cuando apenas cobras 1000€ al mes. Entonces ¿qué es la felicidad laboral?

Todos y cada uno de nosotros tenemos nuestra propia y personal fórmula de la felicidad.

La felicidad laboral es más que un sueldo. Cuando un trabajador lleva a cabo una tarea correctamente se siente feliz, se siente “realizado”, como se decía antes. Sentir que aportas algo a tu empresa es una sensación gratificante, pero esto exige que tanto el trabajador como la compañía se encuentren en la misma línea.

Se puede mencionar algo obvio, cuando nosotros tenemos una cualidad y la podemos utilizar y sirve para algo, somos felices. Esto ocurre en ámbitos como el ocio, el amor, la educación de nuestros hijos, entre otros. Pero también podemos agregar esta pauta en el ámbito laboral

Un estudio internacional de psicología asegura que cuando tenemos más habilidades qué desafíos, nos aburrimos, nos sentimos infrautilizados, frustrados; por el contrario, cuando tenemos más desafíos que capacidades caemos en la ansiedad, no nos sentimos lo suficientemente capacitados, incluso podemos perder la confianza en nosotros mismos. Por eso es tan importante que algo que ocupa tanto tiempo en nuestras vidas como lo es el trabajo, realmente nos proporcione la oportunidad de ser felices.

Nos han enseñado que el trabajo es una maldición, algo que nos impide hacer lo que realmente nos gusta, que son nuestras aficiones y nuestro ocio. Pero ¿y si el trabajo y la afición se convirtieran en lo mismo? Por eso es importante buscar algo que te motive, que te haga levantar de la cama y comerte el mundo. Y que esto se vuelva tu trabajo.

Una manera de sobrevivir a la rutina es verse bien, sentirse bien en el lugar de trabajo y cómodo con el vestuario laboral. Unos zuecos sanitarios, unas botas de seguridad para los trabajos más duros… (que por qué no, ¡también tienen que verse bien frente al espejo!) Un uniforme para el trabajo al que solo le podrás decir ¡SÍ!

A pesar de esto, el principal determinante de la felicidad humana siempre será el sueldo y para aquellos que dicen que “el dinero no da la felicidad”, si no la da al menos ayuda.