¿Has oído hablar de convenciones? Es una de las últimas tendencias en empresas para hacer equipo. Planea una actividad productiva con tu equipo.
Definitivamente son como unas vacaciones pero que incluyen algo de trabajo y, por supuesto, es mucho mejor que estar en la oficina.
Puede que pienses que todas tus vacaciones incluyen trabajo, ya que es muy complicado desconectar y no mirar los correos electrónicos. Pero aunque mires el móvil o el mail, la jornada laboral implica un número de horas sentado concentrándote solamente en el trabajo. Así que en este caso, aunque parezcan vacaciones no lo son. Es trabajo pero mucho más productivo y divertido para todos.
¿Todavía no lo has probado?
Las actividades extra o convenciones sirven para dar a los empleados el impulso necesario de productividad y motivación, así como estimular la creatividad y el pensamiento.
Dicho esto, desde Tiempo Laboral queremos darte algunos consejos para una actividad productiva:
1. Quédate con los empleados que tengan una ideología afín a la de la empresa:
Cuando trabajes, es importante que te contagies del estado de ánimo de los que tienes alrededor. Tener personas cerca que tienen tu misma visión ayuda mucho cuando se trata de motivación y productividad.
2. Establece las expectativas correctas:
Cuando dices «viajar», la gente escucha «vacaciones». Por lo tanto, antes de hacerlo, todos deben entender que ese viaje conllevará una parte ineludible que tiene que ver con el trabajo. Debes asegurarte de que todos tenéis las expectativas correctas.
3. Sea exigente con el alojamiento:
El lugar donde os encontréis jugará un gran papel en lo que respecta a tu productividad. Por lo tanto, antes de reservar el alojamiento, revisa algunas cosas para asegurarte de que es un buen lugar para estar cómodo, descansar y trabajar.
El mínimo indispensable es que tenga una buena conexión a internet, un escritorio y tranquilidad.
Y luego algunas cosas que pueden ser puntos favorables: calefacción/aire acondicionado y una buena cafetería cerca.
4. Establecer una rutina:
Desde el primer día, trata de establecerse un horario al que podáis ateneros. Una rutina, por mucho que tratemos de escapar durante nuestra vida diaria, es necesaria para la productividad . Tener el mismo horario todos los días, nos ayuda a mantenernos organizados, planificar nuestro tiempo de manera más efectiva.
5. Quedaros en el mismo lugar durante todo el viaje:
Viajar de un lugar a otro no sólo lleva tiempo, sino que también requiere mucha energía. Además, cada vez que llegas a un lugar nuevo, básicamente tienes que comenzar todo desde el principio: acostumbrarte al nuevo entorno, encontrar un lugar donde poder trabajar, establecer una rutina, etc. Por esa razón, es mejor que te mantengas en el mismo lugar por un tiempo, y si es una tarea corta, durante todo el viaje.
Este tipo de actividades pueden enseñarte cuánto podemos hacer cuando nos enfocamos y trabajamos con un propósito. Demuestra la vieja verdad de que las horas que pones en el trabajo en realidad no importan, y que aquellos que pueden equilibrar el trabajo con descansos cualitativos son en realidad más productivos que aquellos que trabajan 8 horas con la cabeza gacha.
¡Te animamos a que lo pruebes tú también!
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